Rimisp – Centro Latinoamericano para el Desarrollo Rural presentó los resultados y conclusiones de la Evaluación Ex-Post del Programa Mujeres Rurales, cohorte 2022-2024, en el patio interior del Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP). 

El estudio presentado por Natalia Slachevsky, investigadora principal de Rimisp, evaluó el impacto del programa a través de criterios como pertinencia, género e interseccionalidad, eficacia y eficiencia, destacando áreas de mejora. De acuerdo con los resultados, el 40% de las participantes consideró que sus ingresos aumentaron gracias a su participación, y las tasas de producción crecieron significativamente, de un 33,4% a un 89,6%. Además, el 68,1% de las encuestadas reportaron un incremento en su ingreso bruto por ventas. Sin embargo, persisten desafíos, como la necesidad urgente de superar las barreras al acceso de tierras y agua.

“Esta es la primera evaluación del Programa Mujeres Rurales desde un enfoque productivo, que busca medir el aumento del ingreso bruto por venta de las beneficiarias. Los resultados dan cuenta que las mujeres mejoran su autonomía económica, pero en montos marginales”, destacó Slachevsky. La investigadora principal de Rimisp agregó que “se requiere revisar el indicador de propósito para poder tener una mirada más completa de cómo impacta el programa en la vida de las mujeres que hacen parte de él.”

La evaluación fue presentada ante autoridades, participantes del programa y representantes de organizaciones vinculadas al ámbito. Las subsecretarias de la Mujer y la Equidad de Género, Luz Vidal Huiriqueo, y de Agricultura, Ignacia Fernández Gatica, resaltaron el impacto del programa y la importancia de considerar los desafíos señalados en el estudio para fortalecer las alianzas institucionales y organizacionales.

El director nacional de INDAP, Santiago Rojas Alessandri, destacó que los resultados del programa son muy positivos y abordó algunos de los desafíos del estudio, como la inclusión de más pertinencia cultural para las mujeres indígenas, quienes constituyen más del 30% de las participantes, y las dificultades que enfrentan las mujeres que viven en zonas rurales aisladas o que deben compaginar sus responsabilidades de cuidado con la participación en el programa.

Sara Araya Gallegos, directora de Programas y Gestión Regional de Prodemu, resaltó los aspectos positivos del estudio, especialmente el aumento de los ingresos. “El 89% de las mujeres encuestadas se sintieron satisfechas y afirmaron que el programa las transformó durante los tres años de duración. Para nosotros, como fundación, estos datos son cruciales, ya que reflejan avances hacia su empoderamiento y autonomía económica”, concluyó.

La ceremonia también abrió un espacio para la reflexión colectiva, donde se escucharon tanto a los técnicos como a las participantes. Nancy Núñez, artesana y miembro de la Mesa de la Mujer Rural, compartió su experiencia: “Este programa debe seguir fortaleciéndose. Me empoderé, aprendí a valorar mi trabajo y mi conocimiento. Las mujeres salimos fortalecidas para tomar decisiones”.

El estudio completo está disponible en: https://shorturl.at/LuJqU