La normativa, elaborada por Agrocalidad, fue revisada por nuestra oficina en este país, en el marco del Proyecto Siembra Desarrollo, en un afán por lograr el fortalecimiento de los modelos de producción sustentable.

El 8 de febrero pasado, el Grupo de Diálogo Rural de Ecuador (GDR-Ecuador) realizó su primera reunión del año. En esta oportunidad, se socializó el Instructivo Nacional para la Producción Agroecológica, elaborado por la Agencia de Regulación y Control Fito y Zoosanitario (Agrocalidad).

En meses pasados Rimisp suscribió un convenio con esta entidad estatal, para para facilitar la adopción de estrategias e implementación de acciones comunes, encaminadas al fortalecimiento de los modelos de producción sustentable, como parte de las acciones de incidencia que se realizan en el Proyecto Siembra desarrollo. Pequeña agricultura y alimentación resilientes al COVID-19.

De esta manera, el consultor Juan Pablo Sciurano, realizó la revisión del Instructivo y emitió sus recomendaciones. Este documento, cuya aplicación tiene carácter voluntario, ha tenido un proceso de construcción de casi una década, en la que se ha involucrado a una diversidad de actores de la producción agroecológica en el país, iniciando con los productores, los mercados, sectores público y privado y, finalmente,  con los consumidores.

Carol Chehab, directora de Rimisp-Ecuador, indicó que la Ley Orgánica de Sanidad Agropecuaria especifica la necesidad de implementar un mecanismo de evaluación y seguimiento de los procesos agroecológicos,  como un paso previo para la implementación de un reconocimiento a este tipo de producción. “La sostenibilidad en la agricultura toma un papel fundamental en este momento, por eso desde este espacio presentamos este Instructivo elaborado por Agrocalidad, para recibir la retroalimentación de los actores del sector”, señaló.

Así también recalcó que es importante contar con un instrumento jurídico para normar la producción agroecológica.  “Establecer una diferenciación en estos productos puede ser una gran oportunidad para los agricultores, al garantizar procesos sostenibles y con estándares para exportación”, expuso.

La presentación del Instructivo estuvo a cargo de Verónica Santillán, directora de Orgánicos de la Coordinación General de Inocuidad de Alimentos de Agrocalidad. De manera introductoria  explicó que a nivel mundial, se han establecido políticas que determinan las directrices y estrategias para mitigar el cambio climático y se promueve la producción sostenible, por lo tanto el Ecuador forma parte de esta corriente y ha adaptado su legislación para reconocer la producción sustentable.

“En un contexto donde surgen los marcos legales alrededor de la agricultura  orgánica, es importante prever mecanismos de generación de credibilidad que no excluyan los pequeños productores”, manifestó, al tiempo que resaltó las ventajas de esta normativa, como la estandarización de conceptos, la diferenciación de mercados y precios,  y la capacidad de evitar fraude al consumidor.