En el documento sostenemos que en el escenario de crisis internacional controlada y reacción interna articulada, la población más pobre que sobrevive de transferencias públicas, ventas de pequeños excedentes de producción para autoconsumo –pero que tienen importancia estratégica para la reproducción familiar– e ingresos laborales provisorios e informales, es paradójicamente la que más sufre los efectos negativos de la crisis transmitidos a través de los mercados de productos y servicios. La paradoja se Buainain y Neder Programa Dinámicas Territoriales Ruralesdebe a que, justamente por su bajo grado de inserción en los mercados, deberían ser las menos afectadas por la vía de los mercados.